Las hay de amor y desamor, de apariciones, muertes y traiciones, en una se cuenta que una mujer envejeció por amor y en otra habla de una pareja y su perro, son las leyendas de Xalapa, calles y callejones llevan su nombre y en otros casos menos afortunados cambiaron de nombre como el de “Callejón de Cuauhtémoc” antes “Callejón de Jesús te ampare”.

Hoy te contamos una, es poco conocida o quizá o no tan popular como las otras, habla de una niña y una cueva en el Cerro del Macuilteptl.

Se cuenta que entre sus caminos, pasillos, laberintos  y jardines, existió una cueva capaz de enriquecer a quien entrara y lograra salir de ella. Tendrías que ser muy afortunado, ya que la cueva solo se podría ver una vez al año.

Una mañana del 24 de junio, una señora de origen muy humilde caminaba por el cerro, llevaba la preocupación a cuestas porque no sabía cómo iba a alimentar a su pequeña ese día. Se sentó bajo un árbol cansada de caminar, cuando de repente sus ojos vislumbraron el destello proveniente de una cueva, entró de inmediato y viendo inmensas riquezas. Esperó el anochecer para llevarse todo lo que había dentro de la cueva, pero no le fue posible porque aún cargaba a la niña, entonces decidió hacer dos viajes, dejando a la niña en la cueva, mientras acarreaba el dinero.

Al regresar, recorrió el sitio de arriba a abajo, sin encontrar la entrada a la cueva, lo hizo así todos los días, durante un año, hasta que la entrada a la cueva volvió a aparecer,  entró ilusionada para rescatar a su pequeña, quien extrañamente estaba jugando en completa oscuridad, como si el tiempo no hubiera transcurrido. La madre la cargó de inmediato para llevarla con ella, no sin antes, tomar más dinero. Cuando salieron, el sol le dio de frente, y la pequeña criatura, en brazos de su madre, se convirtió en arena, volando con el viento.

Tras un año en completa oscuridad, la niña ya se había convertido en un ser nocturno, incapaz de sobrevivir a la luz del día. Desde entonces algunos lugareños veían la figura de una mujer con una niña en brazos, pasear por los caminos del Cerro del Macuilteptl.

Saludos Xalapeños a todos, desde el cerro cinco!

Mil gracias: