La hacienda empezó a construirse en 1525 por Juan Lencero un soldado de Hernán Cortés que tras recibir un premio de la corona decidió invertirlo en este lugar.En sus inicios el sitio funcionó como una posada para los viajeros que se dirigían al puerto de Veracruz y tiempo después empezó a diversificar sus actividades.
La hacienda se empezaba a dedicar a la ganadería a la reparación de carruajes, a la alfarería, al cultivo de algodón y al de la caña de azúcar.
Casi 3 siglos después el lugar fue vendido a Antonio López de Santa Anna por 45000 MXN en oro. La Hacienda de Santa Anna era un paraíso, un espacio bordeado por jacarandás y laureles, uno de los detalles más curiosos que le ocurrieron al mandatario en esta hacienda fue la muerte de su primera esposa y posteriormente protagonizó un nuevo matrimonio con Dolores Tosta, para demostrarle su amor a “Doloritas”, mandó a reconstruir el frente de la vieja capilla, las columnas y el campanario los cambio para romper con el estilo colonial.
El reinado de Santa Ana en el Lencero se acabó en 1856 cuando Ignacio Comonfort decretó el embargo de sus bienes y el mandatario fue enviado al exilio.
En 1981 el gobernador Agustín Acosta Lagunés adquirió el lugar y ordenó la restauración de la casa principal.
Hacienda El Lencero actualmente funciona como museo, conserva las bellezas de la época, dentro de la casa se pueden ver muebles, objetos y recuerdos del tiempo en el que se construyó y de sus 500 años de historia, además de la belleza de sus jardines y de sus árboles, vale la pena recorrer el corredor de los pájaros, su salón de armas, el de juegos y el de música. Se encuentra ubicado a unos minutos de Xalapa, su horario es de martes a domingos de 10:00 a 17:00 hrs.
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